Continuamos con la breve historia de los experimentos económicos más famosos que se han realizado. Después de haber explicado la semana pasada el dilema del prisionero, en esta última parte de este apartado del trabajo destaqué el experimento de Chamberlín en 1948 por ser la primera ocasión en la que se ha intentado simular un mercado en el laboratorio. En el apartado 3 de de este trabajo (a la que llegaremos en las próximas semanas) explico cómo se llevó a cabo y que conclusiones obtuve del experimento económico que realicé hace ya casi tres años en el que también simulaba un mercado.
LA ECONOMÍA EXPERIMENTAL
1.2 Una breve historia sobre los experimentos económicos. (III)
Edward Hastings Chamberlin realizó en 1948 uno de los experimentos que poseen mayor trascendencia en la actualidad. Su importancia radica en que fue la primera ocasión en la que se simulaba un mercado en el laboratorio.
Chamberlin creó su mercado experimental informando a cada comprador y a cada vendedor del precio de reserva (con este precio de reserva intentaba dar un rol en el mercado a cada uno de los inversores) de una unidad del bien que se negociaba en el mercado (es decir, para cada comprador, el precio máximo por el cual podría obtener un beneficio de la compra, y para cada vendedor, el precio mínimo al cual podría obtener beneficio con la venta).
Las negociaciones se realizaron sin que existiera ningún tipo de regulación. A los estudiantes que participaron se les permitía circular libremente por la clase para negociar unos con otros de manera descentralizada. La agregación del precio de reserva por parte de los compradores y de los vendedores determinaba las curvas de demanda y de oferta en el mercado. De esta forma, tanto el precio como el volumen de equilibrio pudieron ser establecidos claramente. “A pesar de ésta estructura competitiva, Chamberlin concluyó que los resultados se desviaban sistemáticamente de las predicciones de un mercado competitivo. En particular, advirtió que, en la gran mayoría de los 46 sesiones experimentales que llevó a cabo, la cantidad de transacciones realizadas fue superior a las que determinaba el equilibrio y el precio medio de negociación fue inferior al precio de equilibrio”. DAVIS, D., et. al (1993, 6-7); KAGEL, J., et. al (1995, 13-16).
Entre los alumnos de Chamberlin, se encontraba Vernon Smith, otro de los economistas destacados que utilizó la economía experimental como herramienta para desarrollar sus teorías. Como comentábamos en la Introducción, fue galardonado con el Premio Nobel en el año 2002 como reconocimiento a su excelente labor en el establecimiento de los experimentos de laboratorio como metodología de análisis económico, sobre todo en el estudio de los mecanismos de mercados alternativos.
Smith pudo comprobar el precio de equilibrio teórico: el precio aceptable para igual número de vendedores que de compradores. En 1962, cuando publicó los resultados de sus primeros experimentos, descubrió, para su asombro, que los precios obtenidos en el laboratorio se acercaban mucho a sus valores teóricos, aun en los casos en que los sujetos no tenían la información necesaria para calcular el precio de equilibrio. Los experimentos demostraron que, la existencia de un gran número de agentes económicos perfectamente informados no es un requisito previo para la eficiencia del mercado. Extrajo, por tanto, como conclusión, que los mercados funcionan bien, incluso con supuestos más débiles de los que normalmente se afirmaban que eran necesarios. En los años 90 y mediante la realización de experimentos similares, Smith analizó diferentes mecanismos para asignar derechos de aterrizaje en aeropuertos usando mercados asistidos por ordenador y evaluó varios modos de organizar los mercados energéticos en Australia y Nueva Zelanda. SMITH, V. (1962,111-137); SMITH, V. (1994,113-131); CLIFT, J. (2003, 6-7)
Daniel Khaneman fue el otro autor laureado con el premio Nobel de Economía en el año 2002, en reconocimiento a su labor experimental de haber integrado los avances de la investigación psicológica en la ciencia económica, especialmente en relación al juicio humano y a la toma de decisiones. Khaneman y su colega, Amos Tversky , trabajaron en el estudio de la percepción mental de la incertidumbre, cuyo principal resultado quedó plasmado en su artículo “The prospect Theory; Analisys of decisions under risk (1979)”, en el que desarrollaron una teoría alternativa a la Teoría de la Utilidad Esperada.
En la década de los ochenta y los noventa se incremento notablemente el número de experimentos económicos realizados. Este gran crecimiento dio lugar al nacimiento de una amplia variedad de áreas, en donde diferentes grupos de economistas comenzaron a estudiar las mismas ideas desde diferentes puntos de vista. Todo este proceso, en el cual los resultados experimentales sugieren nuevos experimentos, nos permite comenzar a concebir a la Economía Experimental como un proceso acumulativo. KAGEL, J., et. al (1995, 21).
La tendencia en estos últimos años ha sido publicar casos prácticos que se han aplicado a diferentes mercados como herramienta para explicar determinadas conductas que se dan en la realidad. Un pequeño ejemplo de esta colección son los artículos publicados por Alvin E. Roth titulados: “New Physicians: A Natural Experiment in Market Organization (1990)“, “Game theory as a tool for Market Design (1999)” o “Matching and Allocation in Medicine and Health Care (2003)”.